Durante todo el curso escolar, los niños y niñas acuden al colegio con pesadas mochilas cargadas de libros, libretas, material escolar, deportivo… Debemos ser conscientes de que se trata de un esfuerzo físico que, si no se realiza correctamente, puede tener posibles repercusiones en su sistema músculo-esquelético, especialmente en la columna vertebral.
Saber cómo organizar y llevar correctamente la mochila del cole resulta esencial, ya que evitará muchos problemas de espalda y escoliosis que se suelen generar cuando los peques la llevan muy abajo en la lumbar y colgada de un solo asa, no repartiendo la carga. En este artículo, vamos a darte todos los consejos necesarios para que tus hijos lleven su mochila adecuadamente en su camino al colegio.
Elige una mochila adecuada.
La elección de la mochila es muy importante. Lo ideal es que se adapte lo máximo posible a las particularidades físicas del niño y, al mismo tiempo, sea cómoda y estable. Por este motivo es necesario que tenga cintas anchas, acolchadas y regulables que se encarguen de reducir la presión en la espalda y garanticen una distribución equitativa del peso.
Si también cuenta con un respaldo acolchado y firme y un cinturón torácico o lumbar para estabilizar la carga, mejor que mejor. Incluso son recomendables varios bolsillos y compartimentos extra que faciliten distribuir eficazmente su contenido.
Organiza correctamente el contenido de la mochila.
La distribución adecuada del peso en la mochila es fundamental. Lo ideal es colocar los objetos más pesados, como los libros, cerca de la espalda. Luego, debemos acomodar los objetos más ligeros, como por ejemplo las libretas, el estuche y la merienda. Además, debemos prestar especial atención a que el peso total de la mochila nunca supere el 10% del peso del niño que la usa.
Reglas para llevar correctamente la mochila:
- La mochila no debe ocupar más del ancho de los hombros ni de la espalda.
- Siempre se debe llevar en los dos hombros.
- Al llevarla, debe mantener la columna recta y no curvada
- Para repartir el peso, hay que situarla en la zona dorsal y no en la lumbar.
- La mochila debe permanecer pegada al cuerpo, sin que quede separada de la zona lumbar.
- Al colocarla, es preferible subirla a una lugar elevado en lugar de agacharse.
¿Y las mochilas de ruedas?
Las mochilas de ruedas no son las más adecuadas. Esto es debido a que, aunque con ellas los niños no cargan el peso en espalda, tuercen todo el cuerpo cuando las arrastran y se sobrecargan mucho sus hombros. De este modo se pueden generar torsiones corporales y posturas escolióticas.
Si de todos modos optamos por una mochila tipo carrito, es preferible que cuente con un asa fija ajustable a la altura del niño. Para evitar posibles lesiones, debe empujarla en lugar de arrastrarla. Y a la hora de subir escaleras, si no tiene asas, la debe sostener en brazos y pegarla al cuerpo lo máximo posible.
Si tienes alguna pregunta o necesitas más información, no dudes en ponerte en contacto con nosotras. Recuerda, en “Alba Bar. Centro de Fisioterapia y Osteopatía” somos especialistas en Fisioterapia Pediátrica.
